Liv Tyler tiene un rostro genial para ser la imagen de la mejor firma de cosmética por ello el director creativo de Givenchy apuesta por ella.
Esta apuesta por los rostros de belleza clásica por parte de la firma francesa es bastante distante con la línea que se ha seguido en las campañas de moda, donde no hace falta echar la vista muy atrás para recordar como sus apuestas han sido de lo más arriesgadas.
Para su línea de belleza la firma sigue apostando por la sobriedad, nada de experimentos ni de looks transgresores. El resultado para este otoño-invierno 2010 es la imagen que tienes en la portada donde vemos a Liv a la que quizás se le podía haber sacado algo más de partido del que se le ha sacado en esta campaña, con una imagen que apenas transmite en comparación a lo que nos tiene acostumbrados.
El vestido de encaje que luce en la campaña deja bien a las claras las intenciones de la firma en cuanto a los tonos para esta temporada: negro, rojo y nude.
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