El aceite de ducha de L’Occitane es formidable.En realidad es un gel de ducha y un aceite a la vez. Limpia tu cuerpo y a la vez lo deja hidratado gracias a su fórmula rica en aceites de almendras dulces. Tiene textura de aceite pero en cuanto se pone en contacto con el agua se transforma en una espuma delicada. Por lo tanto si lo aplicas sobre tu piel seca, la textura seguirá siendo como la de un aceite normal, grasa, pero al mezclarse con agua enseguida cambia de textura, se disuelve y se convierte en un gel con espuma. Se extiende fenomenalmente sobre tu piel y la deja muy suave. Destaca por su olor a almendras dulces, fresco y elegante. Deja la piel suave, mejor dicho te lo deja ultra suave. Si tienes la piel seca o deshidratada este aceite de ducha es ideal para dejarlo muy suave. Si necesitas más hidratación puedes usar un hidratante. Si te gusta el olor de este producto, te recomendamos usar su crema corporal correspondiente: Concentrado de Leche Almendra. Esta crema es deliciosa, a parte deja la piel también muy suave. El packaging es de un plástico resistente y el líquido sale por un dosificador, así fácilmente puedes controlar la cantidad.
Seguimos hablando del cuidado de los pies y ahora te decimos que cuando tus pies están hinchados y adoloridos es mejor que te des un baño de agua tibia con sal, al que también le puedes añadir algún aceite esencial para relajar y disfrutar de su aroma. Una vez enjuagados y secos debes ponerlos en alto y reactivar la circulación, en cualquier superficie que te permita elevarlos de forma cómoda durante un buen tiempo. Cuando estés en la ducha puedes aprovechar para masajear tobillos, pies y gemelos alternando chorros de agua fría y caliente para relajar los músculos y las articulaciones, activar el flujo sanguíneo y tonificar tu piel, como si estuvieras en un buen spa. Aunque estamos seguros que el mayor de los placeres que puedes sentir es caminar descalza por la playa. Sobre la arena, con los pies en la orilla o con el agua hasta los tobillos, cada forma tiene sus beneficios como tonificación e hidratación entre otros, aunque debes vigilar con no excederte en los primeros paseos o acabarás con ampollas. Si no hay playa entonces el césped del parque puede ser un buen sustituto para descalzarte y relajar un rato a tus pies. Para culminar puedes aprovechar cualquier pequeño rato para sentarte y estirar los pies y hacer rotaciones de tobillos, así evitaras tensiones si pasas tiempo sin moverte.
Estamos pasando este verano 2012-2013 y es el momento en que tus pies necesitan más cuidados de lo debido, no olvides que las altas temperaturas pueden causar sequedad, roces, e hinchazón. Este verano invita a pasar más tiempo al aire libre y a caminar muchos más. Unas sandalias de tacón pueden ser divinas para que puedas pasear un buen rato, pero si tienes previsto dar un largo paseo lo ideal es elegir un calzado cómodo con el que puedes disfrutar sin consecuencias dolorosas. Lo mejor es que no sea ni muy alto, ni tampoco plano del todo, si pruebas a andar con chanclas todo el día notarás como se cargan los gemelos, rodillas o incluso afecta a tu espalda. Con unos 3 o 4 centímetros de tacón, una suela flexible y una forma que sujete pero no aprete los dedos ya estarás listas para recorrer lo que haga falta, también hay modelos muy bonitos de este tipo y si elijes un esmalte para las uñas que combine tendrás belleza y comodidad todo en uno. Aun así no puedes dejar de pensar en la hidratación, sobre todo en los talones, con algún aceite o crema específica. Para los días de mucho calor es ideal que tengas aloe vera fresco en la nevera y darte un buen masaje desde la punta de los pies hasta los gemelos. Además de nutrir la piel te dará una sensación muy agradable.
Un masaje antiestrés sirve para liberar la tensión y favorecer la circulación sanguínea. Para realizarlo debes apretar la piel entre las manos como si estuviéras amasando pan, haciendo el movimiento de apretar y levantar sucesivamente. Debes procurar que el masaje sea fuerte pero sin presionar demasiado. Para presionar específicamente en ciertas zonas, se utilizan los dos pulgares, los cuales ejercen la presión en las zonas más pequeñas del cuerpo, sobre todo en los músculos que están junto a los huesos. Las yemas de tus pulgares deben ejercer una presión haciendo movimientos circulares sobre la piel.
Luego presiona ligeramente tus dedos en tu frente, desde el centro hasta el nacimiento del cabello, y desciende así hasta el cuello con el fin de eliminar el exceso de agua.
BUSCAR
