Pestañas Curvadas

Tú misma puedes conseguir un rizado perfecto para tus pestañas usando un rizador de pestañas, el que muchas mujeres solo lo llevan como adorno en su neceser.

Generalmente las chicas lo usan después de haberse dado la máscara, pero esto no debe ser así, ya que puedes provocar el rompimiento del pelo que estará seco y duro por el cosmético aplicado. Las pestañas deben de estar completamente límpias para conseguir curvarlas sin dañarlas.

Si no tienes experiencia debes ir probando el rizador poco a poco, poniendo especial cuidado en no pellizcar el párpado. Rizar tus pestañas tomará tiempo y un buen espejo en especial de aumento será de mucha ayuda.

Si notas que tu mano te puede jugar una mala pasada entonces intenta apoyar el codo en alguna superficie horizontal para que te sirva de centro de apoyo, luego vas cerrando el rizador con las puntas de las pestañas dentro hasta que compruebes que solo has presionado las pestañas y a la altura justa que tú quieres que se haga la curva.

Deberás de apretar el rizador de pestañas con firmeza y aguantar unos segundos, la sensación que crea es bastante molesta, pero te acabas acostumbrando a ella. Cuando retires despacio el rizador notas al instante cómo las pestañas se han curvado hacia arriba, si las comparas con el otro lado verás que el cambio es abismal. Si las quieres más curvadas repite si es necesario hasta conseguir dejarlas a tu gusto

Los rizadores tienen almohadillas blandas de caucho o de silicona en cada lado. De esta manera se evita que se corten las pestañas pero siempre debe tener en cuenta que tienen que estar perfectas para que puedas usarlas, que estén blandas y límpias. Si están duras mejor la cambias. Un truco de belleza que no falla, para conseguir resultados inmediatos es calentar con el secador de pelo el rizador. Ten en cuenta que no debes calentar en exceso las almohadillas, si no bastará con templarlas y que alcancen sólo un poco más de temperatura. De esa manera se marcará más la onda.