La alimentación juega un papel importante en la salud del cabello. Así tenemos que una dieta poco equilibrada es, en muchos casos, la única causa de un pelo desvitalizado, mate y sin vida.
Además de frutas, verduras y agua en abundancia, la doctora Paloma Cornejo, jefa de la Unidad de Dermatología de Instituto Médico Láser, recomienda los ricos en proteínas, como los huevos, la leche, y el queso, las grasas de origen vegetal como frutos secos y aceite de oliva y el ácido linoleico que viene en elaceite de girasol y soja.
La doctora García de Juan va más allá y nos dice que: «Ante un cabello graso hay que controlar el consumo de lípidos y en caso de sequedad incrementar el de ensaladas, frutas y cereales integrales, así como los alimentos ricos en hierro
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