En el verano, el sol y la playa y en invierno, el frío y el viento, suelen ser las causas más comunes que suelen generar cabellos maltratados en las mujeres.Aunque no son los únicos, a todo esto hay que añadir una alimentación no demasiado equilibrada, el estrés y la práctica de deportes como la natación durante todo el verano nos da una exposición al cloro más intensa y si practicamos el sky, el frío y la exposición al sol proyectado sobre la nieve resulta bastante agresivo para el cabello.
Todo esto en cuanto a los agentes naturales, pero los tratamientos de coloración, los desrizados y las técnicas de rizado del cabello, aunque hayan sido realizados con productos de calidad, en algunos casos, dejan como resultado, cabellos más opacos, secos y quebradizos.
El uso de planchas alisadoras, tenacillas rizadoras y un calor excesivo con el secador también agreden a nuestro cabello.
Por todo esto, hay que vigilar la salud de nuestro cabello y al primer síntoma de fatiga capilar, hay que poner manos a la obra y reparar los daños para poder seguir luciendo sano y brillante nuestro cabello sin tener que recurrir a la tijera.
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