El pecho es una de las zonas más seductoras de la anatomía femenina. Pero los embarazos, la lactancia, las hormonas que le someten a frecuentes cambios de volumen, las dietas yo-yo y, fundamental, el desafío de la ley de la gravedad son demasiados retos que dificultan mantener un pecho firme y turgente.
TRATAMIENTO.• Meso-Vac reafirmante de senos. Debe iniciarse dos días después de haber acabado la regla y finalizar dos días antes de la siguiente para evitar aplicarlo cuando el pecho está más sensible. El tratamiento comienza limpiando la zona, para después realizar un peeling con ácido glicólico. Además, se incorpora una loción hidroequilibrante y bisabolol, ambos hidratantes. La exfoliación se realiza con un masaje circular. A continuación, se aplica el gel rearfirmante bioactico C–14, con glucosalina y factor de hidratación, y se hacen penetrar estos activos con la ayuda de un multiinyector sin agujas, subiendo, de forma rotatoria, hasta llegar a la areola y terminando el masaje en ocho. Después, se sustituye el multiinyector por un electrodo bioestimulador con el que se trabaja para reafirmar y fortalecer los tejidos. El tratamiento concluye con un masaje manual, que recorre el pecho, de abajo hacia arriba. Debes realizar dos sesiones por semana, de una hora cada una, hasta completar 12.
MANTENIMIENTO.• Hay que acostumbrarse a terminar la ducha con un masaje rotatorio, sobre el pecho, con agua fría. A continuación, hay que aplicarse, todos los días, una crema reafirmante específica con un masaje circular, siempre hacia arriba. También es muy importante mantener la espalda recta y utilizar el sujetador adecuado a tu talla. Esto parece una perogrullada, pero no lo es, porque, según un estudio realizado por una firma de lencería, cuatro de cada 10 españolas lleva un sujetador inadecuado. Si vas a hacer ejercicio, recuerda utilizar un sujetador específico para ello. Deportes como la natación, en general, y el estilo braza, en particular son muy beneficiosos para tonificar y fortalecer los músculos que sujetan tus senos. En casa puedes hacer un sencillo ejercicio: pon la espalda recta y sitúa los brazos por encima del pecho. Después, coge con tu mano derecha el codo izquierdo y con la mano los pectorales. Repite este ejercicio durante cinco minutos.
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