En una temporada en la que los colores brillantes son protagonistas, el blanco será tu aliado ideal para combinar tus nuevas adquisiciones del verano.
Amarillo, azul, naranja, rojo, fucsia… son los colores de esta temporada. Se llevan en chupines, microminis, faldas, remeritas, camisolas y pantalones clásicos. Sin embargo, el blanco nunca pierde el protagonismo, casi podríamos afirmar que este tono y el verano fueron hechos el uno para el otro. De todas maneras, si bien el blanco es un color que a todas nos queda perfecto sin distinción entre rubias o morochas, para usarlo debés tener en cuenta algunos aspectos fundamentales:
1. Refrescá tus remeras blancas cada temporada.
2. Eliminá bolsillos. Te pueden causar problemas, por ejemplo, que se vean a través de la tela. Lo mejor será que ni los tengas.
3. Prestá atención a lo que se uses debajo del blanco. Nada peor que las transparencias en zonas complicadas. Que tu ropa interior, en estos casos, sea siempre de color piel, tostado.
4. Incorporá un jean blanco a tu guardarropas. Es un básico que podrás usar en cualquier ocasión. Con un traje de baño y ojotas y hasta incluso con tacos y una remera elegante.
5. Usa el blanco para destacar la mejor parte de cuerpo. Los tonos claros agrandan, mientras que los oscuros minimizan. Por ejemplo, si tenés espalda grande y buenas piernas, elegí una prenda superior negra y un buen pantalón blanco.
6. Evitá el blanco en la oficina. Podés enviar un mensaje ambiguo de autoridad. Si ya tenés un traje blanco, no te preocupes, cambiá los botones por otros oscuros, como azules o negros, para agregarle a tu estilo un tono más serio.
7. Cuidado cuando elijas zapatos blancos. Es condición indispensable que sean de buena calidad, de lo contrario, corrés el riesgo de que pasen por vulgares. Mejor si no son del todo blanco, sobre todo, en el taco, elegí los de madera, yute, entre otros materiales.
Amarillo, azul, naranja, rojo, fucsia… son los colores de esta temporada. Se llevan en chupines, microminis, faldas, remeritas, camisolas y pantalones clásicos. Sin embargo, el blanco nunca pierde el protagonismo, casi podríamos afirmar que este tono y el verano fueron hechos el uno para el otro. De todas maneras, si bien el blanco es un color que a todas nos queda perfecto sin distinción entre rubias o morochas, para usarlo debés tener en cuenta algunos aspectos fundamentales:
1. Refrescá tus remeras blancas cada temporada.
2. Eliminá bolsillos. Te pueden causar problemas, por ejemplo, que se vean a través de la tela. Lo mejor será que ni los tengas.
3. Prestá atención a lo que se uses debajo del blanco. Nada peor que las transparencias en zonas complicadas. Que tu ropa interior, en estos casos, sea siempre de color piel, tostado.
4. Incorporá un jean blanco a tu guardarropas. Es un básico que podrás usar en cualquier ocasión. Con un traje de baño y ojotas y hasta incluso con tacos y una remera elegante.
5. Usa el blanco para destacar la mejor parte de cuerpo. Los tonos claros agrandan, mientras que los oscuros minimizan. Por ejemplo, si tenés espalda grande y buenas piernas, elegí una prenda superior negra y un buen pantalón blanco.
6. Evitá el blanco en la oficina. Podés enviar un mensaje ambiguo de autoridad. Si ya tenés un traje blanco, no te preocupes, cambiá los botones por otros oscuros, como azules o negros, para agregarle a tu estilo un tono más serio.
7. Cuidado cuando elijas zapatos blancos. Es condición indispensable que sean de buena calidad, de lo contrario, corrés el riesgo de que pasen por vulgares. Mejor si no son del todo blanco, sobre todo, en el taco, elegí los de madera, yute, entre otros materiales.
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